La economía de plata como motor del desarrollo económico

habilitados
29-10-2021

El aumento de la esperanza de vida y el descenso de la natalidad han traído consigo importantes cambios demográficos que invitan a hacer una lectura del envejecimiento desde una perspectiva diferente. La tendencia al alza en el número de personas mayores a nivel global y, particularmente, en nuestro país, por la que, de cumplirse las estimaciones de Naciones Unidas, España se situará en el año 2040 como el país más envejecido del mundo, por delante de Suiza o Japón, abre paso al mercado de los séniores y emplaza a los estados a conocer las oportunidades que nos brinda la, cada vez más popular, economía de plata o silver economy.

La aportación de los séniores a la actividad económica global se ha visto acrecentada durante el transcurso de los últimos años, convirtiéndoles en un activo generador de riqueza muy importante. En su contribución al “Libro Blanco de la Silver Economy en España”, Juan Carlos Alcaide, fundador y CEO de The Silver Economy, recuerda como los avances alcanzados en el ámbito de la salud y una mejor calidad de vida, pero especialmente “las ganas por vivir” del colectivo, serían las razones por las que “el envejecimiento de la población empieza a verse como algo positivo y como una gran oportunidad de negocio”. Cabe destacar que, tal y como apuntaría Alcaide, aproximadamente un 40% del consumo mundial lo generarían los séniores, quienes, a su vez, realizarían una aportación al PIB europeo del 25%. Contando con que la tendencia actual se mantenga en el tiempo y la esperanza de vida se incremente dos años en la próxima década, el peso de la economía plateada será cada vez mayor. Una situación que llevará a los silver a generar el 32% del PIB comunitario en 2025, lo que supondrá unos 6,4 billones de euros, siguiendo con las estimaciones realizadas por la Comisión Europea.

A nivel nacional, los hogares encabezados por mayores de 55 años concentrarían en la actualidad el 66% de la riqueza neta del país, según una comparativa elaborada por la consultora Longetivity & Retirement Income Solutions (LoRIS), publicada por el diario 65ymás. Por franjas de edad, la población con edades comprendidas entre los 55 y 64 años sería la que dispondría de una mayor riqueza dentro del colectivo sénior. En líneas generales, el poder adquisitivo de los séniores sería mayor que el de la media poblacional.

Ahorrar gracias a la vivienda

En lo que respecta al ahorro privado, el “Libro Blanco de la Silver Economy” evidencia una realidad especialmente característica de España, protagonizada por la escasa popularidad de los planes de pensiones, en contraposición con el valor que ostentaría la vivienda. “Nos encontramos ante un hecho relevante y diferenciador, el importante ahorro en vivienda, que podemos y debemos poner en valor. Si tenemos en cuenta la vivienda en propiedad, el ahorro de los mayores españoles no dista mucho del de alemanes o ingleses”, exponen Iñigo Hernández, director de Desarrollo de Negocios en Óptima Mayores y Luis Castillo, fundador y Ceo de SeniorsLeading. De esta manera, la población española concentraría un índice de propiedad superior al 76%, llegando incluso a situarse por encima del 89% en el caso de los mayores de 65 años. Ante esta situación, en los últimos años han proliferado productos financieros como las hipotecas inversas, centradas en proporcionar liquidez a los mayores gracias al ahorro acumulado de sus viviendas, sin tener que renunciar a la titularidad de las mismas. 

Tal y como se refleja en el citado Libro Blanco, la economía del envejecimiento será fundamental en el progreso de los países, ofreciendo un sinfín de oportunidades, que debemos saber aprovechar, y situando a las personas mayores en el centro de la sociedad.